📅 24/05/2025
Juan 15, 18-21
Intención: fortaleza, fidelidad. Hoy Jesús nos recuerda que seguirle implica ir contracorriente. El mundo rechazó al Maestro y también rechazará a los suyos. Pero no estamos solos: su elección nos sostiene, y su Espíritu nos fortalece.
Haz una pausa. Respira profundamente. Entrégale a Dios tu cansancio, tus luchas, tu corazón inquieto. Deja que su Palabra te hable. Recoge tu alma en silencio y deja que el Espíritu Santo te prepare para escuchar con el corazón.
Jesús advierte que el mundo odiará a sus discípulos como lo hizo con Él.
✨ Fragmento de Yo Soy “El alma que me ama será incomprendida. Pero si se une a mi cruz, entonces me comprenderá. El mundo no puede acoger lo que viene del cielo. Por eso el alma elegida debe ser fuerte, fiel y silenciosa, como Yo en el Calvario.” (Yo Soy, Concepción Cabrera de Armida)
Santísima Trinidad, hoy vengo ante ti con mi fragilidad. El mundo muchas veces me rechaza por seguirte. Dame, Padre, la valentía de Jesús. Dame, Jesús, la fidelidad hasta la cruz. Dame, Espíritu Santo, la fuerza para resistir con amor. Amén.
Lectura del Evangelio (Juan 15, 18-21) 18 «Si el mundo os odia, sabed que a mí me ha odiado antes que a vosotros. 19 Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero el mundo os odia porque no sois del mundo, pues yo, al elegiros, os he sacado del mundo. 20 Acordaos de lo que os he dicho: El siervo no es más que su señor. Si a mí me han perseguido, también os perseguirán a vosotros; si han guardado mi palabra, también la vuestra guardarán. 21 Pero todo esto os lo harán a causa de mi persona, porque no conocen al que me ha enviado.»
En este pasaje del discurso de despedida, Jesús advierte a sus discípulos sobre la hostilidad que enfrentarán. Él no los engaña: el amor fiel al Evangelio genera oposición. Pero también les da consuelo: no están solos, han sido elegidos por Él. 🕊️ Este pasaje refleja una gran verdad cristiana: la fidelidad a Cristo no garantiza aceptación social, sino todo lo contrario. Jesús prepara a sus discípulos para el rechazo. El mundo —entendido como sistema de valores contrario a Dios— no puede acoger lo que no comprende. Así como el Maestro fue perseguido, también sus seguidores lo serán. En el Comentario Bíblico San Jerónimo, se destaca que el término "mundo" representa el ambiente hostil al mensaje de Jesús. La elección divina no es motivo de privilegio, sino de misión y sufrimiento. “No sois del mundo” significa vivir con criterios distintos, lo cual inevitablemente genera conflictos. El versículo 20 muestra la continuidad entre el destino del Maestro y el de los discípulos. El discípulo no es mayor que el Maestro: si a Cristo lo han perseguido, sus seguidores deben esperar lo mismo. Pero también se da una promesa: si algunos escucharon a Jesús, también escucharán a sus testigos. Este texto también denuncia la ignorancia espiritual: “no conocen al que me ha enviado”. La raíz del odio es la falta de conocimiento del Padre. Por eso, el testimonio cristiano es una forma de revelar el rostro de Dios, incluso en medio del rechazo.
Jesús amado, tú no me llamaste para ser aplaudido, sino para amar con verdad. Hoy me siento frágil, a veces temeroso ante el rechazo. Pero tu Palabra me fortalece. Quiero seguirte, aun cuando no sea comprendido. Que tu cruz sea mi gloria y tu Espíritu mi sostén. Amén.
Permanezco en tu presencia, Señor. No hay palabras, solo una certeza: tú me elegiste. Aunque el mundo me rechace, tú me abrazas. En ese abrazo encuentro paz, fuerza y sentido. Aquí estoy, contigo, en el silencio del amor fiel.
Hoy no temeré dar testimonio de mi fe, aunque eso signifique ir contracorriente. Hablaré con caridad y firmeza cuando se cuestione el Evangelio, sin vergüenza ni agresividad.
Por los cristianos perseguidos, para que permanezcan firmes en la fe. Por quienes sienten miedo de hablar de Dios en su entorno. Por las comunidades que sufren rechazo social por su testimonio cristiano. Por los jóvenes, para que descubran la belleza de seguir a Cristo sin miedo. Por nosotros, para que sepamos ser luz aun en medio de la oscuridad.
Gracias, Señor, porque me has elegido para ser tu testigo. Gracias porque no me escondes las dificultades del camino, pero me das tu Espíritu para enfrentarlas. Gracias porque en medio de la prueba, tú permaneces conmigo. Padre nuestro... 🌹 María, Madre del Dolor y del Amor Fiel, acompáñame cuando el mundo no comprenda mi fe. Enséñame a responder al odio con amor, al rechazo con esperanza. Consagro este día a tu intercesión. Dios te salve María...
La exégesis de Juan 15, 18-21 se enmarca dentro del discurso de despedida de Jesús, donde prepara a sus discípulos para la etapa post-pascual. El odio del mundo no es simple antagonismo, sino consecuencia de una incompatibilidad radical entre la lógica del Evangelio y la del mundo. Luis Alonso Schökel propone que la interpretación bíblica debe ir más allá del análisis literal, y abrirse a la dimensión profética del texto. Aquí, el lector no solo se informa, sino que es llamado a tomar posición. Como discípulos, debemos aceptar el conflicto con el mundo como parte del seguimiento auténtico . Croatto añade que la hermenéutica bíblica no consiste en extraer un mensaje fijo, sino en reactivar el texto desde el compromiso vital del lector. La persecución, lejos de ser obstáculo, es parte del camino hacia la plenitud del Reino . En el plano eclesial, este texto ha sido clave para la teología del martirio y la apologética cristiana. Desde los Padres de la Iglesia hasta los mártires contemporáneos, se ha vivido como una confirmación del llamado de Cristo a vivir con radicalidad, sin ceder a la lógica del mundo.